La estación de ferrocarril de Pozoblanco se inauguró oficialmente el 5 de agosto de 1906. Aunque se estima que la misma se construyó entre 1904 (año en el que se hacen las concesiones de las líneas ferroviarias) y 1906 (año en el que las líneas comienzan a funcionar). La Sociedad Minero Metalúrgica de Peñarroya,  con el fin de dar salida a su riqueza minera, será la encargada de activarla, perteneciente a la línea Fuente del Arco-Peñarroya-Puertollano-San Quintín.

En un primer momento la estación no contaba con muchas infraestructuras, pero debido al auge que generó el ferrocarril en Pozoblanco y la comarca, hubo que hacer ampliaciones en 1910.

Así finalmente se le añadió un apeadero, muelles de carga (tanto cubiertos, como al aire libre) grúa, cocheras, sitio para almacenaje y una báscula para pesar vagones y carga. También se incluyeron las viviendas del jefe de estación y del factor de más antigüedad. Ambas situadas en la planta superior. La estación se encontraba ubicada en lo que hoy es el hospital, siendo el actual paseo Marcos Redondo,  el Paseo de la Estación.

Con la llegada del ferrocarril a Pozoblanco las gentes de la comarca de los Pedroches consiguieron el medio de transporte que durante años demandaban, debido al aislamiento que sufría la zona.

El ferrocarril supuso un aumento en la economía pozoalbense, colocando a Pozoblanco como centro económico y logístico del Valle de los Pedroches.

En 1956 debido al declive de la minería en Peñarroya la gestión del ferrocarril se traspasó al Estado, que a  finales de los años 60 anunció el fin de la línea.

Fue en julio de 1970, cuando el último tren pasó por Pozoblanco, poniendo punto y final al ferrocarril que durante más de 64 años recorrió los “caminos de hierro” de la comarca.

Os dejamos un extracto de un vídeo que recoge imágenes del tren pasando por Pozoblanco, es un documento histórico:

https://m.facebook.com/CopePozoblanco/videos/2114418582212923/